Una joven de 17 años perpetró el tiroteo en una escuela de Wisconsin, dejando un saldo de cinco muertos, entre ellos ella misma, quien se quitó la vida.

Un tiroteo en la Escuela Cristiana Abundant Life, ubicada en Madison, Wisconsin, dejó un saldo trágico este lunes 16 de diciembre. La atacante, una joven de 17 años, se quitó la vida antes de la llegada de la policía. Inicialmente, se había informado que un docente y un alumno habían sido víctimas del ataque, pero más tarde se confirmó que en total hubo cinco muertos, incluyendo a la agresora.

El jefe de policía de Madison, Shon Barnes, indicó que varias personas resultaron heridas, entre ellas dos estudiantes que fueron hospitalizados en estado crítico. Según un funcionario policial que pidió permanecer en el anonimato, la atacante utilizó una pistola de calibre 9 mm.

Barnes mencionó que la escuela no contaba con detectores de metales, ya que es considerada un «espacio seguro».

En respuesta a la tragedia, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, instó este mismo lunes al Congreso a «actuar». En un comunicado, Biden solicitó que se aprobaran «leyes sensatas de seguridad armamentística». El mandatario describió el suceso como «impactante e inaceptable», señalando que es fundamental proteger a los niños de la violencia armada.

«Cada niño merece sentirse seguro en su aula», expresó Biden, añadiendo que los estudiantes deberían enfocarse en aprender, no en cómo protegerse durante un ataque. También agradeció la rápida respuesta de las fuerzas de seguridad y envió sus condolencias a las familias de las víctimas.

Este incidente ocurrió en la mañana del lunes en la capital del estado de Wisconsin.

DCN/Agencias