En una reciente entrevista con Ignacio Ramonet, el presidente Nicolás Maduro abordó la situación del salario mínimo y el poder adquisitivo de los venezolanos, prometiendo trabajar en la recuperación de los ingresos.
Desde 2022, el salario mínimo en Venezuela se ha situado en 130 bolívares, equivalentes a aproximadamente 2,5 dólares al mes. Este tema se ha vuelto una de las principales preocupaciones de la población.
Aunque el Gobierno ha implementado bonos como parte de una estrategia para aumentar los ingresos en los últimos años, no se precisó si las acciones futuras incluirán un incremento en el salario mínimo o en esos bonos. Maduro se comprometió a realizar «indexación y recuperación de los ingresos» en 2025, aunque los detalles concretos no fueron aclarados.
El salario mínimo en el país no solo representa la remuneración por el trabajo formal, sino que también incluye prestaciones sociales que garantizan un ahorro para el futuro y se relaciona con aspectos de seguridad social, cajas de ahorro para vivienda y salud.
A pesar de su importancia, el sueldo en Venezuela sigue siendo bajo. El gobierno atribuye la situación a un déficit económico generado por sanciones impuestas por Estados Unidos. Sin embargo, sindicatos y economistas sostienen que los ingresos derivados de la industria petrolera y otras exportaciones podrían permitir un aumento en los salarios de los trabajadores.
Maduro mencionó que el país ha recuperado solo el 10% de sus ingresos, dejando un déficit del 90%. No obstante, no especificó a qué período se refería ni detalló cuál sería el 100% de los ingresos a los que aludía.
DCN/Agencias