El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, declaró el miércoles 8 de enero como «desastre mayor» la situación en California debido a los incendios forestales. Esta designación permite la activación de fondos federales para apoyar los esfuerzos de recuperación en las áreas afectadas, según informó la Casa Blanca.
Los fondos estarán disponibles para los residentes del condado de Los Ángeles, lo que incluirá subvenciones para viviendas temporales, reparaciones en el hogar y préstamos de bajo costo para aquellos que hayan sufrido pérdidas de propiedades no aseguradas. La asistencia busca ayudar tanto a individuos como a dueños de negocios en su recuperación tras el desastre.
Además, se indicó que la financiación federal también será accesible para gobiernos estatales, locales y comunitarios, así como para ciertas organizaciones sin ánimo de lucro, en un esquema de reparto de costos para trabajos de emergencia en la región. También se contemplan recursos para medidas de mitigación de riesgos en todo el estado.
Los incendios han causado la muerte de cinco personas y han obligado a evacuar a más de 80,000 habitantes. En el barrio de Pacific Palisades, las llamas consumieron más de 20 kilómetros cuadrados; en Eaton, 9 kilómetros cuadrados; y en Hurst, 2 kilómetros cuadrados. La combinación de los incendios y fuertes vientos ha resultado en cortes de electricidad, afectando a aproximadamente 400,000 abonados en California el miércoles.
La Casa Blanca continúa monitoreando la situación y se han comprometido a proporcionar la ayuda necesaria a las comunidades impactadas.
DCN/Agencias