Colombia y Perú condenan la «violación de derechos humanos» en vísperas de la investidura presidencial en Venezuela.
El Gobierno de Colombia expresó el jueves su «profunda preocupación y enérgico rechazo» ante las denuncias de abusos de Derechos Humanos en Venezuela, en el contexto de la investidura presidencial programada para este viernes 10 de enero.
El ministro de Exteriores colombiano, Luis Gilberto Murillo, citó informes recientes de la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y del Alto Comisionado de Naciones Unidas, que confirman violaciones de Derechos Humanos en Venezuela y señalan la alteración del orden constitucional en relación con los resultados de las elecciones del 28 de julio.
Murillo instó a las autoridades venezolanas a garantizar plenas condiciones para el ejercicio del derecho a la oposición y a la movilización social, en medio de manifestaciones convocadas contra la investidura de Nicolás Maduro, quien se proclamó ganador en los comicios de julio, a pesar de las acusaciones de fraude por parte de la oposición.
El ministro destacó que, debido a la falta de garantías y transparencia, Colombia no reconoce el proceso electoral en Venezuela, afirmando que «no fueron unas elecciones libres».
Colombia, representada por su embajador en Caracas, Milton Rengifo, no será parte del acto de investidura, según anunció el presidente Gustavo Petro hace dos días.
Por su parte, Perú también se pronunció sobre la situación en Venezuela, expresando su «seria preocupación y enérgica condena» ante lo que calificó de «represión, persecución, detenciones arbitrarias y secuestro» de opositores y sus familias. El Gobierno peruano exigió el respeto a la libertad de expresión y la participación política en Venezuela y demandó la liberación inmediata de todos los detenidos arbitrariamente.
Estas reacciones se producen luego de que la CIDH acusara a las autoridades venezolanas de prácticas de «terrorismo» dirigidas a infundir miedo y controlar a la población. La líder opositora María Corina Machado informó que fue detenida y luego liberada por fuerzas de seguridad tras participar en una manifestación en las horas previas a la investidura presidencial.
DCN/Agencias