¡Escándalo en Hollywood! El marido de Rihanna se enfrenta a un juicio por un impactante tiroteo.

En un ambiente de tensión y expectativa, Rihanna hizo su aparición en el juicio del rapero A$AP Rocky, quien se enfrenta a cargos de asalto con arma de fuego semiautomática. La cantante y madre de su hijo se sentó elegantemente entre su hermana y su mamá, capturando la atención de todos los presentes, a pesar de que el foco del caso recaía sobre el testimonio de A$AP Relli, amigo del acusado.

Este testigo, cuyo nombre real es Terell Ephron, recordó el incidente que tuvo lugar en noviembre de 2021, cuando Rocky aparentemente le apuntó con un arma en una calle de Hollywood. Relli narró que, tras una disputa con el rapero, este sacó un arma, disparando a plena luz del día. «Todo fue como una película, él apuntó hacia abajo y disparó», relató, añadiendo que sintió el roce de la bala en su mano.

Riri presenció toda la escena mientras Relli relataba su versión de los hechos. Además, el testigo mencionó que Rocky disparó otras balas, pero que él se cubrió detrás de un amigo. «Sentí mi mano caliente… no tenía un agujero ni nada», aclaró. Por su parte, el abogado de Rocky argumenta que los disparos no fueron de un arma real, sino de una pistola de fogueo. Relli, sin embargo, insistió en que tenía claro lo que sucedió, señalando su mano raspada como prueba.

Tras el incidente, Relli aseguró que sufrió amenazas de muerte y sufrió un daño considerable en su carrera en la industria musical al ser señalado como un soplón. «Ha sido un infierno viviente», confesó.

Poco después del tiroteo, Relli regresó a la escena del crimen para recoger dos casquillos de bala, mientras que la policía no encontró nada durante su primer recorrido. En un mensaje de texto a Rocky, Relli lo acusó de intentar matarlo, pero el rapero respondió negando las acusaciones y tildándolo de «extorsionador».

Este juicio ha capturado la atención de los medios y los fanáticos, y la presencia de Rihanna no ha hecho más que aumentar el interés en el resultado de este tenso caso. La relación entre la música, el drama legal y la farándula está más viva que nunca en este escarceo judicial.

DCN/Agencias