Marco Rubio, quien fue nominado como secretario de Estado por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, manifestó el 15 de enero que Venezuela está bajo el control de una “organización de narcotráfico”. Durante la audiencia en el Senado para su confirmación, afirmó que lo que existe en el país no es un gobierno, sino un entramado delictivo que se ha consolidado como un Estado.
Rubio expresó su desacuerdo con la administración del actual presidente Joe Biden, mencionando que el gobierno de Nicolás Maduro había engañado a los estadounidenses. Señaló que aunque se habían llegado a acuerdos que incluían la celebración de elecciones, esas elecciones resultaron ser fraudulentas. Añadió que las empresas, como Chevron, han estado invirtiendo significativas sumas de dinero en el país, mientras que el régimen no ha cumplido las promesas establecidas.
El senador por Florida subrayó que más de 7 millones de venezolanos han emigrado de manera obligada y advirtió que la administración de Maduro utiliza esta migración como una herramienta para obtener concesiones de Estados Unidos.
Rubio también hizo énfasis en la creciente influencia de Rusia e Irán en Venezuela, mencionando que los iraníes están involucrándose en la construcción de fábricas de drones dentro del ámbito hemisférico y advirtió sobre la práctica del régimen de emitir pasaportes fraudulentos a agentes de Hezbolá en la región.
Esta declaración se produce en un contexto de tensiones políticas y sociales en Venezuela, que continúa afectando a la población y a las relaciones internacionales.
DCN/Agencias