Elon Musk, designado por el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para liderar los esfuerzos de reducción de gastos del Gobierno, admitió que su meta de recortar 2 billones de dólares de un presupuesto federal de 6,8 billones sería difícil de alcanzar. Durante un debate con el estratega político Mark Penn, Musk señaló que cumplir con esa cifra sería poco probable, sugiriendo que un recorte de 1 billón sería una posibilidad más realista.
Trump nombró a Musk, CEO de Tesla, y al exaspirante presidencial Vivek Ramaswamy para encabezar un grupo de trabajo, denominado Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE), cuyo objetivo es reducir el gasto y simplificar regulaciones para optimizar el funcionamiento del Gobierno.
Lograr los recortes planteados por Musk representa un gran desafío, ya que aproximadamente dos tercios del gasto federal actual se destinan a programas que el presidente Trump ha señalado que no se deberían tocar. Esto incluye áreas como Seguridad Social, Medicare para jubilados, defensa, beneficios para veteranos y pagos de intereses sobre la creciente deuda nacional que asciende a 36 billones de dólares.
Mientras tanto, Trump ha iniciado reuniones con legisladores republicanos para definir su agenda legislativa, que abarca recortes de impuestos y medidas contra la inmigración ilegal. Sin embargo, hasta ahora no han logrado llegar a un consenso sobre los pasos a seguir.
Con información de Reuters.
DCN/Agencias