Delsa Solórzano, representante de la oposición venezolana, calificó este jueves como «inadmisible» la decisión de deportar a los venezolanos con el Estatus de Protección Temporal (TPS) en Estados Unidos. Este permiso, que permite a los beneficiarios vivir y trabajar legalmente en el país, fue revocado el miércoles por el Gobierno de Donald Trump.
Solórzano recordó a través de sus redes sociales que el TPS se otorga a ciudadanos de naciones en crisis y subrayó que las condiciones en Venezuela no han cambiado desde la implementación de esta medida. «La eliminación de esta extensión causaría un daño irreparable», advirtió, pidiendo que se reconsidere esta decisión o que se ofrezca una alternativa que proteja a los afectados.
Aseguró que «miles de venezolanos honestos y trabajadores» en EE.UU. están buscando una vida mejor tras huir del régimen de Nicolás Maduro. Además, expresó su apoyo a las «medidas contundentes» de Trump contra el crimen organizado, incluida la lucha contra el Tren de Aragua, pero enfatizó que los migrantes no deben ser castigados por las acciones de algunos.
La secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, justificó la revocación del TPS, argumentando que la administración anterior, la de Joe Biden, intentó mantenerlo forzadamente.
El TPS actual beneficia a más de 600.000 venezolanos y tiene como fecha de vencimiento el 10 de septiembre de 2025.
Por su parte, la Plataforma Unitaria Democrática (PUD), la principal coalición opositora en Venezuela, expresó su deseo de que se revisen las medidas migratorias del Gobierno de Trump, subrayando su preocupación por el bienestar de cientos de miles de venezolanos que han emigrado debido a la crisis humanitaria en el país. Según cifras de la Plataforma de Coordinación Interagencial para Refugiados y Migrantes, unos 7,89 millones de venezolanos han dejado el país.
DCN/Agencias