Caminar se posiciona como una alternativa eficaz para mantenerse en forma, afirmación respaldada por Víctor Díaz, especialista en ciencias de la actividad física y el deporte. Según Díaz, tener un estilo de vida activo tiene un impacto más significativo en el gasto calórico diario que el ejercicio aislado. Unir esfuerzos por solo una hora de ejercicio diario representa solo un pequeño porcentaje del total del día, que tiene 24 horas.
La Organización Mundial de la Salud señala la importancia de realizar por lo menos dos días de ejercicios de fuerza a la semana, pero enfatiza que se debe garantizar una actividad física de baja intensidad, como caminar, diariamente, un aspecto que a menudo pasa desapercibido por muchos.
Díaz resalta la tendencia de centrarse solo en el ejercicio estructurado y dejar de lado el movimiento cotidiano. Este fenómeno se conoce como NEAT (Thermogénesis de Actividad No Ejercicio), que puede ser determinante en la pérdida o estabilización de grasa corporal. Si bien hacer ejercicio una hora al día es beneficioso, si el resto del tiempo se permanece sentado, la actividad física carecerá de efectividad en la reducción de grasa.
El caminar no solo aumenta el gasto calórico, sino que también favorece la salud cardiovascular y el metabolismo. Estudios han demostrado que esta actividad mejora varios factores de riesgo cardiovascular como la presión arterial y el perfil lipídico. Además, el sedentarismo puede afectar negativamente la resistencia a la insulina y contribuir a la inflamación, creando un entorno metabólico poco ideal para la reducción de grasa.
Díaz menciona que, para optimizar la salud, es recomendable tratar de alcanzar cerca de 10.000 pasos diarios, donde más pasos se traduzcan en mayor gasto calórico y, por ende, en mayor facilidad para perder grasa.
El experto sugiere incrementar la cantidad de pasos en pequeños incrementos, proponiendo agregar 500 pasos cada dos días. También aconseja iniciar la jornada con una caminata corta para asegurar actividad física, dividiendo el movimiento en varios momentos a lo largo del día.
Se recomienda optar por desplazamientos a pie en lugar de depender del vehículo y evitar escaleras mecánicas o ascensores. Además, registrar la actividad diaria con dispositivos tecnológicos puede aumentar la motivación para ser más activos.
Finalmente, se subraya la importancia de reducir las horas sentadas y aprovechar oportunidades para moverse, como pausas en el trabajo, aun en un entorno de teletrabajo.
DCN/Agencias