Familiares de presos políticos realizan protesta en el Ministerio de Asuntos Penitenciarios sobre el sufrimiento del silencio

Como parte de la “Ruta por la Justicia”, familiares de detenidos por motivos políticos se dieron cita en el Ministerio de Servicio Penitenciario en Caracas. Silva, una de las voceras, expuso que, tras siete meses sin ver a su esposo, no han recibido información ni respuesta oficial sobre su situación. Además, denunció que sus hijas, menores de edad, tampoco han podido ver a su padre.

La esposa de Superlano señaló que «el silencio también es tortura» y reafirmó que continuarán luchando por la libertad plena de los detenidos. La situación de salud de algunos reclusos se agrava, como en el caso de Karyn Bastidas, que lleva siete meses detenida en el Comando Nacional Anti Extorsión (Conas) de Santa Rosa, Barquisimeto. Su padre indicó que la entrega de insumos es cada vez más complicada y que la salud de Karyn se deteriora.

En la actividad, cuatro representantes de diferentes áreas de detención entregaron una carta con demandas urgentes, tales como el derecho a visitas familiares sin restricciones, acceso a atención médica, ingreso de alimentos y medicinas, y el cese de traslados arbitrarios. El grupo expresó que se sintieron “burlados” tras recibir respuestas del director General de Atención a las Familias, quien afirmó que se respetan los derechos humanos de los detenidos, argumentando que están en prisión por delitos cometidos.

Algunas afirmaciones del funcionario, que sugerían que los detenidos políticos contaban con financiamiento de opositores, generaron malestar entre los presentes. Andreína Baduel, del Comité por la Libertad de los Presos Políticos, expresó su descontento y la necesidad de respuestas concretas a sus peticiones.

DCN/Agencias