Con el esfuerzo de 1.405 ciclotaxistas, se ha creado un servicio que facilita la movilización en el oeste de Maracaibo, estado Zulia. Esta modalidad de transporte, similar a las que se utilizan en ciudades como Shanghái y La Habana, ha ido ganando terreno en la capital zuliana, especialmente durante los estrictos días de la pandemia.
Los ciclotaxis en Maracaibo son triciclos adaptados para llevar de dos a tres pasajeros en amplios cajones traseros, cubiertos por toldos para resguardarlos del intenso sol zuliano. Este tipo de transporte se ha convertido en una opción popular entre los residentes del oeste de la ciudad, quienes prefieren evitar las altas temperaturas al optar por un servicio que ofrece traslados ventana a ventana.
Yuseth Fernández, presidente de la Fundación Zulia Wayúu, explicó que ante las restricciones del transporte público durante la pandemia de COVID-19, surgió la idea de los ciclotaxis como una alternativa efectiva para trayectos cortos. A partir de este proyecto, el número de ciclotaxis creció rápidamente, especialmente en La Curva de Molina, un área muy activa de Maracaibo.
Fernández también destacó que los ciclotaxistas han sido formalizados, recibiendo carnet y placas para sus vehículos, gracias al apoyo de las autoridades locales y nacionales. Ella señala que la mayoría de los conductores son jóvenes, en su mayoría pertenecientes a la comunidad wayúu, quienes recorren aproximadamente 34 kilómetros diarios. Un ejemplo es Daniel Ipuana, un conductor de 18 años, quien realiza entre 10 y 20 viajes al día, cobrando entre tres y cinco dólares dependiendo de la distancia.
Desde que se formalizó el servicio, se han implementado ocho paradas oficiales para mejorar la organización del transporte, y se busca establecer más paradas en áreas de mayor demanda. Las ciclocarretas están principalmente enfocadas en servir a los sectores populares del oeste de la ciudad, incluyendo comunidades como El Marite, El Obrero y El Carmelo, con La Curva de Molina como centro de operaciones.
Este innovador sistema de transporte ha brindado una opción accesible y ecológica para los marabinos, convirtiéndose en una alternativa viable que sigue en expansión, buscando llegar a nuevas rutas y beneficar a más habitantes de la región.
DCN/Agencias