La ONG venezolana Comité por la Libertad de los Presos Políticos alertó este domingo que la salud del exdiputado opositor Américo De Grazia, quien se encuentra detenido desde agosto de 2022, está «deteriorándose rápidamente». Según la organización, De Grazia no ha recibido la atención médica adecuada.
A través de la red social X, la ONG informó que el exdiputado padece diversas complicaciones de salud, incluyendo infecciones parasitarias y pulmonares, problemas prostáticos, digestivos y hepáticos, dolores crónicos y trastornos neuromusculares, lo que pone su vida en serio riesgo.
El comité hizo énfasis en que Américo De Grazia ha estado recluido durante seis meses en El Helicoide, sede del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) en Caracas, en condiciones de máxima seguridad, sin visitas ni comunicación y sin acceso a atención médica. La familia de De Grazia ha solicitado una evaluación y tratamiento urgente en varias especialidades médicas y ha pedido que se le permita recibir visitas, incluyendo la de su madre.
Desde el comité se sostiene que el exdiputado no ha cometido delito alguno y que su detención es injusta, argumentando que ha sido encarcelado por defender la democracia y denunciar la explotación de recursos. Además, subrayaron que el deterioro de su salud en condiciones de aislamiento extremo afecta sus derechos humanos, haciendo responsable al Estado venezolano de su bienestar.
El 11 de febrero, familiares de otros políticos presos también solicitaron acceso a sus seres queridos y denunciaron la falta de visitas. Andreína De Grazia, hija del detenido, manifestó que no ha podido comunicarse con su padre, que enfrenta acusaciones de «instigación al odio» e «incitación a la rebelión». La ONG Foro Penal reportó que hasta el 10 de febrero había 1.194 presos políticos en el país, muchos de ellos arrestados tras las elecciones de julio de 2024.
DCN/Agencias