Venezolanos deportados de Estados Unidos a México cruzan la frontera con Nicaragua en su camino de regreso a casa

Decenas de migrantes latinoamericanos y caribeños deportados de Estados Unidos han comenzado a cruzar la frontera de Nicaragua en su camino de regreso a sus países de origen o hacia Costa Rica y Colombia en busca de trabajo, según informaron a la prensa local este martes.

Los migrantes, en su mayoría venezolanos, pero también provenientes de Colombia, Haití, Nicaragua, Perú y otras naciones, han pasado por el puesto de control Las Manos, que marca el límite entre Honduras y Nicaragua. Este movimiento se ha intensificado tras cambios en la política migratoria de Estados Unidos bajo el gobierno de Donald Trump, según testimonios recogidos por Radio ABC Stereo, una emisora de la zona norte de Nicaragua.

Gustavo Enrique Gallardo, un venezolano, relató que ingresó a Estados Unidos el 20 de diciembre de 2024. Sin embargo, fue detenido por 45 días durante su cita migratoria y luego deportado a México. Gallardo, oriundo de Maracaibo, expresó que su intención es regresar a Venezuela, aclarando que los migrantes no son delincuentes, sino padres de familia que han enfrentado severas dificultades.

Otro grupo incluye a Milagros Rodríguez, su esposo y sus tres hijos, quienes señalaron que les negaron las citas migratorias y, tras la expiración de su permiso original, fueron deportados a México. También se encuentra Joel Martínez, quien tuvo una experiencia similar, aunque estuvo detenido un mes antes de ser enviado a México.

Algunos de estos migrantes no descartan establecerse en Costa Rica o Colombia para trabajar y así poder reunir dinero con el fin de regresar a casa. El puesto de control Las Manos es uno de los tres puntos de acceso fronterizo internacional entre Honduras y Nicaragua, situado en el municipio de Dipilto, departamento de Nueva Segovia, a 255 kilómetros al norte de Managua.

DCN/Agencias