El 21 de marzo, la administración de Donald Trump prohibió la entrada a Estados Unidos de la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner (CFK) debido a causas de corrupción en su país.
El portal “Notitarde” reportó que la medida, emitida por el Departamento de Estado, también afecta al exministro de Planificación, Julio de Vido, así como a los hijos de la exmandataria y otros familiares directos. Fernández de Kirchner ocupó el cargo de presidenta de Argentina desde 2007 hasta 2015.
El secretario de Estado, Marco Rubio, afirmó que CFK y De Vido abusaron de sus posiciones para beneficiarse económicamente de diversas tramas de soborno relacionadas con contratos de obras públicas, lo que implicó el robo de millones de dólares al gobierno argentino. Rubio también mencionó que múltiples tribunales han condenado a ambos por corrupción, deteriorando la confianza de la ciudadanía y de los inversores en Argentina.
A finales de 2024, la justicia argentina confirmó la condena a Fernández de Kirchner a seis años de prisión e inhabilitación perpetua para ocupar cargos electos, por administración fraudulenta en detrimento de la administración pública.
Hasta la fecha, la expresidenta no ha emitido comentarios sobre la prohibición, pero el actual presidente, Javier Milei, se pronunció en redes sociales. Publicó un mensaje que decía: “CHE Cristina… Fin”, en referencia al estilo habitual de CFK en sus críticas hacia él, donde suele comenzar sus publicaciones con «Che Milei».
DCN/Agencias