Luisana García, una madre de tres hijos originaria de Maracaibo, se encuentra entre las víctimas de un grave accidente en Texas, provocado por una tormenta de polvo que afectó la región. Este fenomenal sistema de tormentas ha dejado a su paso un saldo trágico de al menos 13 fallecidos en varios incidentes de tráfico en Estados Unidos, además de incendios forestales que han consumido cerca de 300 viviendas y estructuras en el estado de Oklahoma.
En el área del Panhandle de Texas, la sargento Cindy Barkley, del Departamento de Seguridad Pública de Texas, confirmó que cuatro personas perdieron la vida en accidentes de tráfico relacionados con las condiciones adversas de polvo. Por otra parte, en Kansas, un choque masivo en la Interestatal 70, próximo a la frontera con Colorado, involucró a más de 50 vehículos y resultó en la muerte de ocho personas, según la información proporcionada por la Patrulla de Carreteras de Kansas.
Las condiciones climáticas han sido extremas, caracterizadas por vientos fuertes y niveles de humedad inusualmente bajos, lo que ha creado un escenario de desastre en varios estados de las llanuras y el Medio Oeste estadounidense. Según cifras del Departamento de Gestión de Emergencias de Oklahoma, se contabilizaron 130 incendios a través de 44 condados del estado, lo que llevó a la evacuación de cientos de individuos en las zonas afectadas.
La combinación de estos factores meteorológicos ha desencadenado una serie de eventos trágicos y peligrosos, poniendo en alerta a las autoridades y a la población. La situación sigue siendo monitoreada mientras se realizan esfuerzos para atender a las víctimas y mitigar los efectos de estas inclemencias climáticas.
DCN/Agencias