La empresa Hutchison de Hong Kong ha decidido vender su participación en dos puertos del canal de Panamá a un consorcio estadounidense, liderado por BlackRock, por un monto de 19 mil millones de dólares. Esta transacción podría ser vista como una posible solución a la crisis diplomática entre Panamá y Estados Unidos, que se intensificó tras las declaraciones del entonces presidente Donald Trump sobre la influencia china en el canal. Trump había amenazado con acciones para recuperar el control del canal, incluso mencionando el uso de la fuerza.
La venta de la operación de los puertos, que son parte de los cinco que gestiona Hutchison, podría aliviar las tensiones, según analistas. Benjamin Gedan, del Wilson Center, comentó que esta decisión evita la necesidad de cancelar el contrato de Hutchison, lo que podría perjudicar la inversión en Panamá y no generaría represalias de China. Además, Gedan destacó que de esta manera se silenciarían los argumentos sobre el control chino del canal.
Jorge Quijano, exadministrador del canal, también se pronunció sobre la venta, sugiriendo que era previsible una transacción comercial que no chocara con los intereses estadounidenses. Quijano aseguró que esta operación pone fin a la narrativa sobre los puertos de Balboa y Cristóbal como una amenaza debido a su conexión con Hutchison.
Hasta el momento, el gobierno panameño no ha emitido ninguna reacción oficial respecto a este anuncio, que se dio a conocer en un día festivo en el país.
DCN/Agencias