La Corte Suprema de Estados Unidos decidió el lunes a favor de la administración del presidente Donald Trump al levantar una orden de un tribunal inferior que prohibía la deportación de inmigrantes venezolanos indocumentados bajo la Ley de Enemigos Extranjeros de 1798. La decisión se tomó con un voto de 5 a 4.
El tribunal estableció que aquellos inmigrantes que enfrentan deportación bajo esta ley deben tener la oportunidad de impugnar su expulsión legalmente. A pesar de esta restricción, la Corte permitió que la administración Trump reanude las deportaciones temporales que habían sido bloqueadas por un juez de distrito.
El presidente Trump había utilizado esta ley, que históricamente se había aplicado en tiempos de guerra, para deportar a supuestos pandilleros venezolanos a El Salvador. Los abogados de algunos de estos deportados argumentan que sus clientes no estaban involucrados en actividades delictivas y que fueron deportados principalmente por sus tatuajes.
Trump celebró la decisión en sus redes sociales, afirmando que la Corte Suprema defendió el Estado de Derecho y la seguridad en las fronteras. El juez de distrito James Boasberg había emitido una orden que prohibía los vuelos de deportación después de que varios venezolanos fueran enviados a El Salvador el 15 de marzo. La Corte Suprema revocó estas órdenes, señalando problemas técnicos de jurisdicción debido a que los demandantes se encontraban en Texas mientras el caso se presentó en Washington.
A pesar de la decisión, la Corte dejó claro que los inmigrantes tienen derecho a ser notificados de su situación y a impugnar su deportación. El tribunal indicó que estos detenidos deben ser informados de su estado bajo la Ley de Enemigos Extranjeros. Lee Gelernt, abogado de la ACLU, consideró que el fallo fue una «victoria importante» para el debido proceso.
La votación fue a favor de los cinco jueces conservadores, con la oposición de los tres jueces liberales y Amy Coney Barrett. Los jueces liberales expresaron su preocupación sobre el uso de una ley centenaria para enviar a personas a prisiones severas. La administración también ha utilizado imágenes de supuestos miembros de la pandilla Tren de Aragua como parte de su campaña contra la inmigración ilegal.
DCN/Agencias