La administración Trump decide excluir celulares, computadoras y chips de la lista de nuevos aranceles.

La Administración de Donald Trump ha decidido eximir de los nuevos aranceles a productos electrónicos como celulares, procesadores, discos duros, chips y computadoras de las importaciones chinas. Esta medida fue anunciada por la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de EE.UU. (CBP) el reciente viernes.

Esta decisión es relevante para empresas como Taiwán Semiconductor Manufacturing Co., que ha realizado significativas inversiones en EE.UU. Así también afecta a otros fabricantes de chips en el país. Sin embargo, Bloomberg advierte que este alivio arancelario podría ser temporal.

La exención se origina de una orden previa que prohibía que los aranceles adicionales se superpusieran a los aranceles nacionales, señalando que es posible que estos productos estén pronto sujetos a un arancel diferente, posiblemente más bajo para China. Las nuevas pautas surgen después de que Trump impusiera un arancel del 125 % a productos provenientes de dicho país, medida que afecta a empresas tecnológicas como Apple, que producen la mayoría de sus dispositivos en ese territorio asiático.

El incremento en los aranceles a China, así como a otras naciones donde Apple fabrica, incluyendo Vietnam e India, llevó a la empresa a enviar cinco aviones con dispositivos desde Asia a EE.UU. a finales de marzo, en un intento por evitar los nuevos impuestos.

Expertos coinciden en que este traslado de producción al territorio norteamericano podría resultar económicamente inviable. Dan Ives, analista de Wedbush, estima que un iPhone fabricado en EE.UU. podría costar hasta 3.500 dólares. Mientras tanto, al mantener la manufactura en el extranjero, se anticipa que los precios de los iPhones aumenten para los consumidores estadounidenses, ya que los aranceles podrían incrementar los costos de equipos elaborados principalmente en China y India.

DCN/Agencias