El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, pidió el ayer a la comunidad internacional apoyar el diálogo entre la oposición y el Gobierno de Venezuela «sin presiones ni sanciones» aunque expresó su preocupación por el estancamiento de este proceso.
«Pedimos a la comunidad internacional que exprese su respaldo al proceso interno venezolano, de manera positiva, sin presiones ni sanciones», dijo Insulza al inaugurar la 44 Asamblea General de la OEA en Asunción.
Este fue el primer pronunciamiento del organismo luego que el miércoles la cámara baja del Congreso estadounidense aprobara sanciones contra funcionarios de Venezuela por supuestas violaciones de derechos humanos durante las manifestaciones antigubernamentales que ya dejan 42 muertos. El proyecto debe aún pasar por el Senado antes de convertirse en ley.
Insulza sostuvo que «la situación de Venezuela sigue siendo motivo de preocupación».
«Desde un inicio sostuve que realizar un diálogo entre las partes era indispensable y que la OEA podía contribuir a ello. La decisión fue hacerlo bajo los auspicios de Unasur y aplaudimos tal determinación», dijo.
Sin embargo, el secretario general de la OEA indicó que ven «con tristeza que el diálogo no avanza».
«El diálogo supone voluntad, no sólo de hablar sino de escuchar, dejar de lado prejuicios y estar dispuestos a conceder, para encontrar terreno común». «No vemos que ello ocurra, pero seguimos pensando que no hay otra salida, y una vez más convocamos al Gobierno y a la oposición de Venezuela, a buscar un entendimiento que todo su pueblo anhela», exhortó Insulza.
El canciller venezolano Elías Jaua, quien estará presente en la sesión plenaria del miércoles en Paraguay, advirtió a mediados de mayo que su país denunciará ante la ONU y la OEA la «injerencia» de Estados Unidos y sus «amenazas» de sanciones en el marco de la crisis política que vive el país.
Por ahora se desconoce si los cancilleres de los estados miembros de la OEA debatirán este tema que los ha dividido en el pasado en la reunión que se celebrará hasta el jueves.
Roberta Jacobson, subsecretaria adjunta del Departamento de Estado norteamericano para el Hemisferio Occidental, dijo la semana pasada que consideraba inoportuno sancionar a Venezuela o sus funcionarios en el marco de la crisis que atraviesa el país desde febrero.
DC/AFP
Foto: Web