El presidente de Bolivia, Evo Morales, acusó este viernes a Chile de tergiversar los argumentos sobre la disputa marítima entre ambos países, y afirmó que las inversiones portuarias chilenas sólo benefician a empresas privadas.
En un acto en el departamento de Cochabamba (centro), Morales denunció que, al contrario de lo que dice el Gobierno chileno, éste no está cumpliendo con el Tratado de Paz y Amistad de 1904, que estableció los límites entre ambos países tras la Guerra del Pacífico (1879), en la que Bolivia perdió su litoral a manos de Chile.
Morales respondió así a la ofensiva diplomática lanzada esta semana por Chile, que defiende que Bolivia sí tiene de facto un acceso al mar de sus mercancías a través de puertos chilenos y concesiones aduaneras, lo que le cuesta a Santiago unos 100 millones de dólares anuales.
Las autoridades chilenas «dicen que invierten mucha plata en los puertos chilenos. Quiero que sepan que en la demanda internacional no está en debate el Tratado de 1904, pero si vemos el tratado, (Chile) no está cumpliendo», sostuvo Morales.
Según el mandatario, la inversión del Estado chileno en los puertos «es para el sector privado, no para el pueblo chileno ni para el pueblo boliviano».
«Sería importante que ellos revisen los datos económicos, cuánta deuda económica tienen con Bolivia en 135 años, después de invadirnos y quitarnos la salida al mar», espetó Morales.
El presidente boliviano pidió a las autoridades chilenas que precisen cuánto deben a Bolivia por los recursos naturales que genera el territorio «arrebatado» en la Guerra del Pacífico.
En esa contienda, Bolivia perdió 400 kilómetros de costa y 120.000 kilómetros cuadrados de territorio.
Además, Morales se mostró seguro de que los argumentos del Gobierno chileno «no confundirán al pueblo boliviano ni al mundo», después de que Bolivia presentara, en 2013, una demanda ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya para forzar a su país vecino a negociar en firme una solución a la centenaria reivindicación marítima.
La tensión entre ambos países por la cuestión marítima ha aumentado en la última semana, después de que Chile iniciara esa campaña internacional para mostrar su posición frente a la demanda presentada por Bolivia ante la CIJ.
En el documento «Chile y la aspiración marítima boliviana: mito y realidad», que será difundido por ese país a través de sus embajadas, el Gobierno chileno defiende que Bolivia sí cuenta con un acceso costero a través de los puertos chilenos, aunque no con soberanía, como reclama el Ejecutivo boliviano.
Según el documento, el acceso boliviano al mar y la potestad aduanera de la que goza ese país cuestan al Estado chileno unos 100 millones de dólares anuales.
También esta semana, el Gobierno de Chile protestó oficialmente por un reloj que las autoridades bolivianas regalaron a los asistentes a la Cumbre del G77 y China celebrada en Bolivia los pasados 14 y 15 de junio.
El reloj tiene la forma del mapa de Bolivia, pero se ha modificado de forma que incluye también parte del territorio costero perdido en la Guerra del Pacífico, y que hoy pertenece a Chile.
AR/DC/Últimas Noticias