El sistema de bandas anunciado por el vicepresidente del área económica, Rafael Ramírez, permitirá que disminuya la brecha entre el paralelo y el oficial. Activar este mecanismo, a juicio de los economistas, generará una apreciación real de la verdadera tasa a la que deben adquirirse las divisas.
Sostienen que Sicad I y Sicad II, son mecanismos temporales, por lo que deberán mutar hacia un sistema estable y permanente, a través del cual todos los sectores de la economía nacional puedan tener acceso a las divisas.
De acuerdo con el diputado Ramón Lobo, miembro de la Comisión de Finanzas y Desarrollo Económico de la Asamblea Nacional, “este tipo de cambio funcionaría bajo el esquema de bandas, que se establece en un mínimo y un máximo, sobre el cual se establece un promedio diario”, cuyo funcionamiento debería estar a cargo del Banco Central de Venezuela.
“Unificar las tres tasas de cambio que existen actualmente, podrá generar una apreciación más real de cuál es la verdadera tasa de cambio, eso orientaría mucho mejor la toma de decisiones”, afirma Lobo, al explicar que la aplicación de esta medida manteniendo el control de cambio, “debe contribuir con una mejor asignación de divisas y combatir el mercado paralelo, sector que distorsiona la fijación de los precios actualmente”.
En tanto, el economista Alejandro Sucre, agrega que la eficiencia del mecanismo dependerá de un conjunto de medidas. Sobre la brecha entre una banda y la otra, explica que “si el Gobierno logra implementar medidas fiscales con lo que podría mejorar la eficiencia del gasto público, la brecha será estrecha”. Refiere que “el tipo de cambio sería entre 35 y 45 bolívares”.
De acuerdo con Sucre, el sistema “tiene que venir acompañado por otras medidas, como abrir oportunidades a inversionistas, definir bien el modelo económico, si quieren inversión privada o no, además deben bajar la burocracia, ya que no hay sistemas cambiario que funcione con un solo oferente de divisas”.
Sobre el monto de la tasa, en la que oscile el sistema de bandas, los economistas, son partidarios de que ésta esté por debajo del Sicad II, que hasta ayer cerró en 49,97 bolívares por dólar. Algunos opinan que debe estar entre 10 y 25 bolívares para no afectar en gran medida la inflación que ataca sin cesar el bolsillo de los venezolanos. Otros mencionan 35 a 45 bolívares por dólar.
El economista José Grasso Vecchio no estableció una cifra específica para el sistema de bandas, pero asegura que la misma “debe estar muy por debajo de la tasa Sicad II”, aunque aclara que lo importarte del mecanismo radica en la sostenibilidad en el tiempo. “No me atrevo a decir sobre qué tipo de cambio deben estar oscilando esas bandas, pero eso estará bajo la garantía de la oferta y el tiempo, que se tenga confianza en la sostenibilidad del esquema como garantía de que eso pueda funcionar y tenga éxito”, señala.
Según Elías Matta, miembro de la Comisión de Finanzas, la implementación del sistema de bandas “hará desaparecer el 6,30, pero eso supone el incremento del costo de vida”. Advierte que “el dólar podría valer entre 10 y 25 bolívares, seguro dejarán el más barato para alimentos y medicinas y otro dólar para el resto de los sectores”.
Mientras el economista José Ramón Acosta, coincide en la intención de la eliminación de la tasa de Bs. 6,30. Dice que la unificación cambiaria, más que representar una devaluación, viene a ser “la eliminación del subsidio de los rubros y servicios específicos que se adquieren a la tasa más baja que hay actualmente”.
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