La oferta de teléfonos móviles en Venezuela es limitada. Algunos optan por usar su cupo electrónico para comprar un celular, pero no todos pueden hacerlo.
Quienes sueñan con un teléfono inteligente deben invertir altas sumas de dinero para obtenerlo.
Las marcas más cotizadas en el mercado de telefonía móvil, como Samsung, Apple o HTC, ostentan precios elevados en Venezuela.
Un Samsung Galaxy S4 está valorado entre 35.000 y 49.000 bolívares en agentes autorizados o tiendas en línea.
Un iPhone 5S se consigue hasta en Bs. 79.000, como se evidencia esporádicamente en vitrinas de locales comerciales. Es decir, que se requieren 10 salarios mínimos, o más, para comprar el popular smartphone.
“Yo compré un carro de agencia, hace cinco años, en 30 millones. Hoy, el teléfono que cargo en mi bolsillo, vale más”, así ilustró el alza de costos en el país un usuario consultado.
Opciones reducidas
Aunque no todos los celulares son “impagables”, las opciones modestas son reducidas.
Como en el resto de los rubros, las colas para adquirir un teléfono en la compañía estatal Movilnet son extensas. Toma un día entero culminar una operación que hasta hace un par de años era sencilla.
Las personas esperan por números desde las 7:00 de la mañana, sin saber cuál es el aparato disponible.
El “terminal socialista” Vtelca, con Android integrado, está por encima de los 2.500 bolívares, cuando se encuentra. Otras compañías cuentan con dispositivos sencillos, que apenas poseen cámara sin flash, MP3, y grabador, los venden en 1.900 bolívares o más.
Igualmente, hay terminales norcoreanos en 10.000 bolívares.
Agencias/Notitarde