La imagen es demasiado fuerte y ha causado rechazo por parte de la comunidad internacional y a través de las redes sociales se ha conocido el impacto.
Se trata de un niño de apenas 7 años, hijo del terrorista fugitivo Jaled Sharrouf, agarrando con ambas manos la cabeza de un soldado sirio asesinado.
Según el diario ‘The Sydney Morning Herald’, la fotografía se tomó en la ciudad siria de Raqqa, feudo del Estado Islámico, y fue publicada la semana pasada en la cuenta de Twitter de Sharrouf, uno de los terroristas más buscados de Australia, que viajó a Siria el año pasado con el pasaporte de su hermano.
“¡Ese es mi chico!”, puso Sharrouf al pie de la foto.
De acuerdo con el portal RT, el material no es el único que ha publicado por Sharrouf, de ascendencia libanesa, en su cuenta de Twitter. También ha compartido imágenes posando con sus tres hijos, todos ellos con armas.
Agencias