La economía venezolana se derrumbó en 4 puntos, en el primer semestre de 2014, con un pico negativo de 10 por ciento en la construcción y de 9 puntos en industria, estimó este miércoles en un estudio propio la central empresaria Fedecámaras, que exigió al gobierno que divulgue los datos macroeconómicos.
El Gobierno había fijado una meta de alza del PIB de 4% para 2014.
Venezuela, pese a disponer de las mayores reservas petroleras mundiales y los altos valores del crudo, atraviesa un período de muy alta inflación, retracción económica, sequía de divisas y fuerte desabastecimiento, marco en el que ha dejado de publicar muchas estadísticas oficiales hace varios meses.
“No tenemos cifras (oficiales) de inflación, no tenemos cifras de escasez, no tenemos cifras de caída del Producto Interno Bruto. No hay manera de planificar”, subrayó el presidente de Fedecámaras Jorge Roig.
Agilizar decisiones
Fedecámaras, que regularmente es demonizada por el gobierno por su participación -bajo otra directiva- en el golpe de Estado contra Hugo Chávez en 2002, destacó su “preocupación por la gravedad de la crisis económica”.
“El gobierno -dijo Roig- no termina de tomar las decisiones que amerita la gravísima crisis, que está profundizándose cada día. La semana pasada renunció un gabinete (completo, aún sin renovar ningún cargo) y en Venezuela no ha ocurrido nada”.
Respecto de la inflación, recordó que en los últimos 11 años de gobiernos chavistas (hasta mayo de 2014), los datos oficiales marcan que el costo de la cesta básica de alimentos se multiplicó casi por 29, para 2.777 por ciento de aumento.
La última cifra oficial conocida de inflación, a mayo, marcó un alza interanual de 61 por ciento, mientras que los últimos datos de escasez, relativos a marzo, indicaban que faltaban casi uno de cada tres productos o servicios básicos.
La carencia de insumos básicos ha llevado a suspender actos quirúrgicos “no urgentes” por falta de anestesia.
Correo del Caroní/DC