Baltazar Porras, arzobispo de Mérida y ex vicepresidente de la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), calificó como una “burla” la oración “Chávez nuestro” difundida esta semana durante un acto proselitista del Partido Socialista Unido de Venezuela (Psuv).
Porras aseveró que el Gobierno Nacional quiere “no solo apropiarse del lenguaje religioso, sino convertirlo en un arma para atornillar los principios y valores de la revolución”, a la vez que denunció el intento de “imponer una especie de religión laica”.
El prelado sostuvo que el rechazo al plagio del Padre Nuestro, “una oración universal de todos los cristianos”, no proviene solamente de la jerarquía eclesiástica, sino de “cualquier persona respetuosa de las creencias de los demás”.
Al respecto, Porras también recordó que el episcopado venezolano ha insistido en la necesidad del diálogo y la reconciliación entre los venezolanos porque “implican el respeto y aceptación de los demás”. También criticó las acusaciones a la CEV por pronunciarse contra esta blasfemia, especialmente las hechas por Nicolás Maduro, quien la calificó de “inquisición” y de “odiar al pueblo”. Porras aclaró que el episcopado “no odia a nadie”.
Por último, se refirió a las circunstancias políticas en las que se difundió este plagio, mientras los venezolanos tienen necesidades y padecimientos. “Este ‘Chávez nuestro’ se presenta en medio de una población que está a la espera de soluciones de sus muchos problemas que son angustiantes y que tienen que ver con la seguridad, el abastecimiento y con la igualdad de unos y otros”, cuestionó.
Unión Radio/DC