Neymar y Camilo Zúñiga se abrazaron antes del amistoso que las selecciones de Brasil y Colombia juegan en Miami, 63 días después del choque de cuartos de final del Mundial que marcó la eliminación del país andino y la lesión de la estrella de la Canarinha por un golpe del lateral colombiano.
La expectación por el reencuentro de los dos jugadores, capitanes de sus selecciones, rindió emociones entre el público pues tras un saludo protocolario previo al sorteo del terreno y la posesión del balón, el defensor y el delantero se abrazaron y hablaron al oído.
Pareció entonces que ambos se reconciliaban.
La victoria de Brasil por 2-1 en el partido de cuartos de final del Mundial terminó con drama pues un rodillazo de Zúñiga ocasionó a la postre la rotura de la tercera vértebra lumbar de Neymar, que le impidió continuar en el torneo.
EFE/DC