Venezuela encabeza la lista de países con más casos de Chikungunya en Suramérica, según el último reporte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Según el informe de la semana epidemiológica 37, de fecha 7 al 12 de septiembre, revela que en ese lapso hay 303 casos de transmisión autóctona, 70 importados.
Por su parte, el último boletín epidemiológico del Ministerio para la Salud, revela que 10 estados del país están en situación de epidemia, siete están en alarma. Los principales estados con casos autóctonos son Carabobo, Aragua, Vargas, Distrito Capital, Guárico, Mérida, Lara y se suma Miranda.
El informe del Ministerio de Salud muestra que la vigilancia del Chikungunya debe desarrollarse a partir de la del dengue, teniendo en cuenta las diferencias en la presentación clínica. De igual manera en el documento se precisa que un caso es sospechoso, si el paciente presenta aparición súbita de fiebre alta, generalmente acompañada de dolores articulares, de cabeza, náuseas, cansancio y erupciones cutáneas.
Además explica que para el diagnóstico, además de las pruebas confirmatorias, se toman en consideración características epidemiológicas como lugar de residencia, historia de viajes y exposición.
El Director General de Salud Ambiental, Jesús Toro, informó que entre el 16 y el 22 de agosto fueron detectados 35 nuevos casos de fiebre causada por el virus Chikungunya, todos confirmados por el Instituto Nacional de Higiene Rafael Rangel, con lo que la cifra de casos en el país se eleva a 195.
Que personas se quedan calladas aun teniendo los síntomas o clínicas no reportaran, directamente a las autoridades, la existencia de pacientes con Chikungunya, multiplicó los contagios autóctonos en Venezuela. Son habitantes que no viajaron a zonas afectadas por el virus, pero hoy están infectados y son parte de los 82 casos de transmisión local contabilizados por el Ministerio de Salud, hasta el pasado 11 de agosto.
Sobre esta situación en particular, Jesús Toro, director de Salud Ambiental del Ministerio de Salud, expresa cómo en Vargas, por ejemplo, ocurrió un hecho que debe llamar a la reflexión.
“Una persona llegó (de viaje) con síntomas, no avisó, se hizo tratamientos caseros, pensando que era solo una gripe, y no era así. Hemos podido identificar que es responsable de once casos, pero en otros, como los del estado Aragua, no se ha podido saber”, explica Toro sobre cómo la subestimación de este venezolano, a las señales de la enfermedad, causó un impacto en el país.
DC/ultimasnoticiasvenezuela
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