Un grupo de trabajadores de la Alcaldía de Caracas protestaron para exigir la cancelación de los beneficios laborales que se les adeuda desde el año 2012, además del retraso de cuatro meses del aumento salarial de 30% que fue decretado en mayo por el presidente de la República, Nicolás Maduro.
La deuda en pasivos laborales afecta alrededor de 8.000 mil trabajadores, quienes además reclaman la dotación de uniformes y homologación de cestaticket para los jubilados y pensionados que aún sigue sin concretarse.
“No somos guarimberos, pero tenemos cuatro meses de espera. El sueldo no nos alcanza y el alcalde Jorge Rodríguez no da respuestas (…). No hemos percibido el aumento decretado en mayo, ganamos salario mínimo, aquí se acabó el tabulador. Lo único que nos ayuda es la prima por antigüedad”, dijo Jenny Pérez, quien trabaja como obrera en la alcaldía.
Pérez aseguró que el alcalde Rodríguez se comprometió en otorgarle cargos fijos a más de 2 mil trabajadores contratados, sin que hasta la fecha se hayan cumplido.
“Ofreció sentarse con jubilados y seguimos esperando, no estamos de acuerdo con el contrato macro. El que se firmó en 2011 desmejoró 90% la calidad de vida”.
Los voceros de los trabajadores criticaron el silencio administrativo que mantiene la alcaldía ante la falta del pago oportuno de sus deudas.
Aseguran que el diálogo es la única manera de evitar el conflicto con los trabajadores; por ello piden iniciar la discusión del contrato colectivo que fue admitido ante el Ministerio del trabajo para dignificar al personal obrero. De lo contrario, prometen tomar acciones de calle hasta ser reivindicados.
“En la alcaldía hay obreros de primera y de segunda, hay violación del contrato, hay contratados con más de seis años (…) el HCM es insuficiente. Si cobramos sueldo mínimo como nos hacemos exámenes afuera”, indicó Tomas Reyes, obrero de la alcaldía.
DC/Globovisión
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