La quema de basura indiscriminada por parte de los vendedores informales de los alrededores de la plaza Baralt, en la zona de interés turístico del casco central de Maracaibo, provocó que una de las paredes de la antigua capilla terciaria del Convento se esté quemando de a poco.
“Todas las tardes, o temprano en la mañana queman la basura que no viene a recoger el camión del aseo urbano, pero esa solución trae consecuencias también porque el humo y el olor que tenemos que tragarnos el resto de los comerciantes es insoportable. Y no hay reclamo por eso”, añadió Rocío Palmar, comerciante formal de la plaza.
La pared que colinda con la calle que pasa frente al templo de San Francisco está completamente ahumada y comenzó agrietarse por el calor. “Cuando empiezan a quemar los desechos es imposible pasar por la callecita de piedras, porque el calor da miedo por el fuego que agarra el basurero acumulado. Es un peligro porque ese fuego debilita cualquier estructura”, dijo Marianela Jiménez, comerciante.
Esta capilla del Convento, que integra la red de patrimonio nacional, fue vendida hace años a una organización gremial, y actualmente es utilizada como depósito de la mercancía de los buhoneros. “Además, hay un bote de aguas blancas, y cada vez que llega el servicio es el río que corre por la calle, y los zancudos”, denunció Jiménez.
DC|Panorama