El vicepresidente de la República, Jorge Arreaza; los ministros del Gabinete Ejecutivo y alcaldes asistieron a una misa en la iglesia San Francisco de Asís, en Caracas, en homenaje a las víctimas de las protestas de febrero y marzo de este año.
Durante el sermón, el padre Numa Molina criticó que con el paso del tiempo se ha disfrazado la Navidad de “mercantilismo” y que esta época se ha convertido en el “primero yo y los demás que los parta un rayo”.
“Es la locura de comprar y comer ciertos platos”, apuntó y añadió que muchos venezolanos se han convertido en “pernil-dependientes” y terminan cayendo en situaciones donde, mencionó, “se esconde la mercancía o se vende por vías inalcanzables”.
Afirmó que actualmente “se ha desviado la Navidad” del encuentro sencillo y desinteresado en familia, los espacios para compartir con amor lo que se tiene y para ofrecer un balance del año.
Por otra parte, el padre aseveró que lo ocurrió en febrero y marzo, fecha en que murieron 43 personas en protestas, “no puede volver a ocurrir en un país cristiano”. Añadió que la violencia no es la vía para superar las diferencias e invitó a las víctimas y victimarios de estos sucesos a que se sometan a un examen de conciencia transparente, al arrepentimiento sincero y a enmendar la vida. “Las guarimbas y muertes nunca más”.
Asimismo, hizo un llamado a las autoridades a combatir la impunidad. “¿qué pasa con el respeto a la vida, un valor que está en crisis y que necesitamos reforzar con urgencia desde el seno de la familia?”.
La fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz; el defensor del Pueblo, Tarek William Saab; el alcalde del municipio Libertador de Caracas, Jorge Rodríguez; la ministra para la Comunicación e información, Jacqueline Farías, y el jefe del Distrito Capital, Ernesto Villegas, entre otros, asistieron a la actividad religiosa.
DC | Globovisión