Nuestra historia republicana es rica en acontecimientos heroicos, de distintas naturalezas y de múltiples y variados protagonistas, que siempre han tenido como denominador común la lucha por la Libertad, la Soberanía y por supuesto por la Democracia, como objetivos y forma de vida de nuestra sociedad. Muchos y complejos han sido los momentos de nuestra historia, donde ha tenido que relucir el valor y arrojo de nuestro pueblo, para encontrar rutas, por difíciles que sean, para lograr los objetivos liberadores trazados, uno de ellos se remonta al siglo 18, cuando en 1810, el 19 de abril la incipiente ciudadanía caraqueña se presentó en el cabildo de Caracas a rechazar el mando de Vicente Emparan en la entonces Capitanía General de Venezuela, en lo que conocemos como el primer hecho histórico concreto, que dio origen a la guerra por la Independencia de la Nación.
El Siglo pasado también fue escenario para que el pueblo en la calle lograra los cambios que se trazó como meta y luego de 37 años de férrea dictadura gomecista y de Presidentes nombrados en cenáculos, este mismo pueblo, irrumpió con fuerza arrolladora en 1945 y el 18 de octubre de ese año, logró producir los cambios hacia la democracia y la elección directa universal y secreta tanto del Presidente como del Congreso Nacional y gracias a la sensatez del Presidente Medina Angarita, quien reconoció la inviabilidad de su gobierno y sin dispararse un tiro, este prefirió abandonar la Presidencia de la República, para dar paso a una Junta Revolucionaria de gobierno, que llevó al País hacia la Democracia y concretó el cambio político con la convocatoria de una Asamblea Nacional Constituyente. El 23 de enero de 1958 se contabiliza, como otro ejercicio de soberanía y democracia directa e intransferible del pueblo, cuando sociedad civil y militares institucionalistas y demócratas, echaron del poder al último dictador de ese siglo el general Marcos Pérez Jiménez y para fundamentar con mayor fuerza el planteamiento que vincula a nuestra Venezuela con la hidalguía, en este comienzo de siglo específicamente el 11 de abril del año 2002, un millón de caraqueños marchando en las calles, exigieron la renuncia del entonces Presidente Hugo Chávez, quien no le quedó más alternativa que renunciar a su cargo, tal como lo anunciara el general Lucas Rincón la noche de ese histórico día, visto el rechazo que el pueblo mostraba y expresaba en las calles de Caracas hacia su gobierno.
Estos episodios de nuestra vida republicana, es necesario escrutarlos y narrarlos a los venezolanos, porque al día de hoy, estamos en una conjetura semejante, con un Presidente y un régimen, que ha sobrepasado todos los límites de tolerancia de nuestros compatriotas, porque su fracaso es de tal magnitud y su presencia en el poder ha generado tanto rechazo en la población, que hoy podemos afirmar que más del 85% de nuestro pueblo, no sólo está descontento con el gobierno, sino que está exigiendo por los cuatro puntos cardinales del País, que Maduro debe renunciar en términos perentorios al cargo de Presidente, porque después de la derrota del 6D, no fue capaz de producir las rectificaciones que la nación amerita para salir de la crisis, sino más bien lo que ha hecho es, profundizar el modelo fracasado, llevándonos a la agudización terminal del desabastecimiento, la escasez, la inseguridad y el colapso de los servicios públicos vitales para la vida de los venezolanos, que aunado con la tétrica persecución política y el terrorismo de estado, que mantiene a ciudadanos demócratas y decentes tras las rejas, hacen inviable e insostenible a este gobierno agónico. Si nuestro pueblo en la calle fue capaz de salir de Emparan, Medina, Pérez Jiménez y Chávez; hoy hay mayores razones para salir de este presidente y por ende de este régimen, estas realidades nos obligan a activar los mecanismos constitucionales acordados para la salida y paralelamente convocar al pueblo a exigir la RENUNCIA de Maduro, porque tocaron el fondo del fracaso en todos los órdenes de la vida del País y él se ha convertido en el principal obstáculo, para sacar adelante a Venezuela
“Quienes defienden el derecho a la vida de asesinos, avalan la pena de muerte de ciudadanos inocentes”PSB.
DC / Lic. Pedro Segundo Blanco / Ex parlamentario del estado Sucre / petersecond1@hotmail.com / @pedrosegundoABP