“Muera el miedo” escribí la semana pasada, convencido de que si no superamos el temor y desasosiego que el régimen trata de inocularnos para su supervivencia, lo tendremos por largo tiempo.
Superar el miedo se manifiesta en acciones de calle sostenidas, democráticas y contundentes, para exigir el fin de la tragedia, el cambio de modelo económico y la salida de Nicolás, el incapaz. Superar el miedo y actuar con valentía pasa por la unidad de la alternativa democrática, la que había estado quebrantada. Gracias a Dios y a la toma de conciencia del liderazgo de las organizaciones democráticas, la unidad en la acción comienza a perfilarse, nace la esperanza. Viva la unidad.
Aciertos y errores, comprensibles en cualquier actuación humana, se encuentran en el día a día de la oposición al régimen decadente, oposición que según todas las encuestas -todas las encuestas sin excepción- es proclamada como alternativa triunfadora, tal vez gracias más a los errores del gobierno ineficiente y corrupto, que a la acción propiamente opositora de los últimos meses. El régimen vive su más bajo nivel de aceptación, cercano al 20 %, y la oposición se encuentra en su período de oro, presto a derrotar el continuismo si la unidad marca sus pasos. La oposición se encuentra entre triunfar, por un lado, o dejar que avance el entierro del país, por el otro. Gracias a Dios ha habido comprensión de la gravedad del momento, y los líderes opositores comienzan a coordinar estrategias y acciones para pasar la página de la pesadilla de los últimos 16 años.
Diferencias estratégicas, referidas ellas a cómo avanzar en la lucha contra la dictadura, había ido distanciando los factores políticos que se sientan en la Mesa de la Unidad Democrática, alejando así el fin del desastre. Si cada quien avanza con su propia estrategia y por su propio camino, el moribundo continúa pataleando. Ponerse de acuerdo en la acción es lo inteligente, ha privado la inteligencia.
Los distintos factores de la oposición están de acuerdo en lo fundamental, luego lo lógico es sumar esfuerzos para salir de Nicolás y su entorno podrido, para dejar atrás un régimen troglodita que pretende imponer un modelo reñido con el progreso y la modernidad. Igualmente, estamos de acuerdo en hacer surgir un gobierno que impulse la paz social y el desarrollo económico, dentro de un marco de democracia y tolerancia.
En qué momento dar mayor énfasis a una acción u otra, es algo que puede discutirse y convenirse, lo importante es que hay acuerdo para: acompañar activamente a la gente en su protesta de calle contra el desabastecimiento y la inflación, el crimen y la ineficiencia; tomar la calle en manifestaciones pacíficas y contundentes; participar en las elecciones parlamentarias de este año con fórmulas unitarias; pedir la renuncia a Maduro, renuncia que no está reñida con la Constitución por estar contemplada en esta; convocar una Asamblea Constituyente -estimo que esta iniciativa anima menos a muchos- pero tampoco es obstáculo insalvable. Las acciones pueden y deben sumarse, el resultado será el fin del régimen y el inicio de una nueva hora.
Personeros del gobierno admiten la debacle. En sorprendente declaraciones, Jaua -el Ministro de las colitas de PDSVSA, delito que ya debería tenerlo en la cárcel- pidió “luchar contra la ineficiencia, la corrupción, el burocratismo, el descontrol y la falta de seguimiento a los procesos impulsados”. Reconoce Jaua los errores y delitos del régimen decadente, lo que no reconoce ni dice es quiénes son los culpables, encontrándose él mismo entre quienes encabezan la lista que hoy tiene en primer lugar a Nicolás, cuya renuncia solicito aquí una vez más.
Llegada la hora de la unidad, y cuando se están dando los primeros pasos efectivos para su consolidación, no es válido ventilar más los errores y revitalizar las molestias del pasado reciente. Por el contrario, lo deseable es que quienes queremos que este 2015 sea año de cambio, y que el cambio comience ya, contribuyamos a la unidad y la estimulemos, que recriminemos lo que no sirve al propósito común. Viva la unidad.
DC / PACIANO PADRÓN / pacianopadron@gmail.com / @padronpaciano