Entre enero y febrero ingresaron 923 cadáveres a la morgue de Bello Monte

El gobierno venezolano no ha implementado ningún ‘nuevo’ programa de seguridad en lo que va de año, lo que en cualquier país pudiese indicar que la política que se ejecuta actualmente debe estar funcionando.

Sin embargo, en el caso del gobierno de Nicolás Maduro, la situación no parece ser así. Desde su llegada al poder, el número de ingresos a las morgues del país ha registrado un alza significativa.

De hecho, solo en la morgue de Bello Monte, de manera extraoficial, el número de cadáveres ha aumentado con cada año que Nicolás Maduro lleva en el poder. 6,4% entre enero y febrero de este año (923 cadáveres) con respecto al mismo período en 2015 y 3.3% (867 cadáveres) respecto al mismo período en 2014.

Con la cifra de 923 cadáveres entre enero y febrero, el primer bimestre de 2016 se convierte en el más violento desde que Maduro asumió el mando. La cifra representa un alce significativo, si se toma en consideración el mismo periodo en 2015 y en 2014.

No en vano, según la ONG mexicana Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública, Caracas es la ciudad más peligrosa del mundo, con una tasa de 119,87 homicidios dolosos por cada 100 mil habitantes. La cifra de ingresados va casi a la par con la inflación, que a pesar de tres habilitantes y diversas políticas económicas -que incluyen más dos devaluaciones- sigue subiendo a un ritmo acelerado.

Solo en el pasado año, tras un período de no divulgación de información macroeconómica, el Banco Central de Venezuela indicó que la cifra de inflación fue de 180,9% (la más alta del mundo, además).

Curiosamente, y a pesar de la aparición de cinco ciudades venezolanas en el listado de las 50 más violentas en 2015 de la misma ONG, el Jefe de Estado no asomó el tema de la inseguridad -o los planes ejecutados- durante su informe de Memoria y Cuenta el pasado 15 de enero frente a la Asamblea Nacional.

DC | El Cooperante