La pobreza en Venezuela aumentó 6,7% entre los años 2012 y 2013, de acuerdo al informe «Panorama social de América Latina 2014» divulgado este lunes por la Cepal.
La cifra es una de las más altas registrada por un país en la región, asegura el análisis que ubica en 28% de la población latinoamericana en condiciones de pobreza.
Entre 2012 y 2013, la tasa de pobreza en Venezuela pasó del 25,4% al 32,1%, mientras el índice de indigencia creció 2,7 puntos porcentuales (del 7,1% al 9,8%) durante el mismo período.
El índice de pobreza en el país durante 2013 es mayor a países como Perú (23,9%); Panamá (23,2%); Costa Rica (17,7%); Brasil (18,0%), Chile (7,8%) y Uruguay (5,7%).
No obstante, la cifra es menor que la registrada en Colombia (30,7%); Ecuador (33,6%); El Salvador (40,9%); Paraguay y República Dominicana (40,7%).
La inflación mató el poder adquisitivo
La Cepal también analizó el impacto de la inflación en el poder adquisitivo en la región. El informe coloca a Venezuela como la única nación donde se produjo «una caída significativa del salario real», con un índice de -4,4% entre 2012 y 2013. Esto obedeció a la «aceleración del proceso inflacionario», destacó el informe.
La caída del país contrasta con el incremento del poder adquisitivo en naciones como Chile (cercano al 4%); Uruguay (3%); Colombia (2,6%), Paraguay (2,2%) y Brasil (1,1%).
Avances en cuanto a servicios públicos
La Cepal, por otra parte, destacó el avance del país en su lucha por mejorar las condiciones de vivienda, acceso a servicios básicos, educación, empleo y protección social de los más empobrecidos.
El estudio, inédito en los informes que elabora la Cepal, destaca el descenso de la «pobreza multidimensional» en Venezuela, que pasó de 32% a 19% entre los años 2005 y 2012.
«Los países de América Latina y el Caribe enfrentan hoy el reto de seguir impulsando los progresos significativos en la reducción de la pobreza y el desempleo, así como ampliar los incipientes avances en la distribución del ingreso, alcanzados en conjunto con la consolidación democrática, la estabilidad macroeconómica y las políticas sociales», destaca el informe.
DC | UN