Ígor Akinféyev, el portero de la selección rusa de fútbol alcanzado hoy en la cabeza por una bengala lanzada desde la grada al comienzo del encuentro contra Montenegro, se encuentra ingresado en un hospital de Podgorica, en estado consciente y con quemaduras en el pelo.
La agencia montenegrina Mina señaló que el guardameta fue trasladado al Centro Clínico de la capital del país, para mantenerlo en observación.
Según la edición digital del diario Vijesti, la bengala le quemó parte del pelo.
El incidente se produjo cuando no había transcurrido ni un minuto del encuentro Montenegro-Rusia clasificatorio para la Eurocopa de Francia.
La agresión de la grada contra Akinféyev hizo que el árbitro detuviera el juego y enviara a los dos equipos al vestuario después de que los servicios médicos sacaran a Akinféyev del terreno de juego.
El partido tardó media hora en reanudarse y desde la megafonía del estadio se advirtió a lo espectadores de que el encuentro quedaría definitivamente suspendido si volvían a producirse incidentes.
DC | EFE