El Ministerio de Servicio Penitenciario continuó este martes las negociaciones referidas al desalojo del Internado Judicial Yare II.
Desde la semana pasada algunos de los detenidos en esta cárcel se declararon en huelga de hambre, ante los rumores sobre la medida finalmente anunciada a través de un boletín de prensa del despacho encabezado por Iris Varela.
Debido al conflicto, las visitas fueron suspendidas la semana pasada y fue reforzada la vigilancia por parte de la Guardia Nacional Bolivariana.
Los internos temen que se profundice el retardo de los procesos judiciales si son trasladados a instalaciones lejanas de los juzgados donde están sus expedientes, como ocurrió recientemente con reclusos del Rodeo II trasladados a la cárcel de El Dorado, en el estado Bolívar
El director de la ONG Una Ventana para la Libertad Carlos Nieto dijo que la mudanza puede ser problemática debido a la imposibilidad de precisar cuáles personas están detenidas en Yare II y cuáles en Yare I. “Ambas cárceles sólo están separadas por una reja”, explicó.
El lunes, un grupo de familiares de los detenidos fue recibido por una directora de Servicio Penitenciario en la sede de El Rosal. Posteriormente, Varela declaró que no complacerán “a personas que lo que buscan es la violencia”.
“Los traslados y la seguridad de los internos hacia otros Centros Penitenciarios, estará totalmente garantizada con el apoyo de todos los órganos de justicia del país, entre ellos el Ministerio Público y la Defensoría del Pueblo. Se tomarán las medidas para que este proceso de desalojo se desarrolle de la mejor forma, sin que se generen hechos violentos”, aseguró Wilmer Apóstol, director de Régimen Penitenciario. El área desalojada, según informa la misma nota de prensa, será reacondicionada para implantar el nuevo régimen penitenciario.
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