El personal del supermercado que cerró el establecimiento, luego de una inspección y orden emitida por la Alcaldía de San Francisco bajo disposición del decreto municipal 199, informó que se pudrieron kilos de comida del restaurante para clientes y comedor de los empleados.
El sábado, tras días paralizado el servicio de ventas, lograron determinar la pérdida de 12 kilos de arroz blanco, dos kilos de pasta, bandejas de ensaladas, cerca de seis kilos de pollo y jamón, cremas. Eran los alimentos que se ofrecen tipo bufet a comensales de la comida preparada.
La tienda ubicada en La Coromoto suspendió las labores en cumplimiento a la disposición municipal que les sancionó con cierre temporal, en dos ocasiones, por 72 horas. En atención al lapso, los trabajadores retornaron a las tareas y acusaron actuación fuera de orden al bajarse la santamaría de un establecimiento “prioritario. Habían otros productos que no se pudieron vender porque el alcalde ordenó el cierre”.
DC|La Verdad