«En Maracaibo de todos se aprovechan y esta no iba a ser la excepción”, exclamó la Zoraida Romero, conductora marabina, ayer en la mañana. El motivo de la expresión fue descubrir que en el punto de instalación del chip de la gasolina ubicado en el muelle de Pequiven, identificaron a personas “bachaqueando” los puestos de la larga cola.
“Yo llegué aquí a las 8.00 de la mañana y como a las 11.00 vinieron unos funcionarios a marcar los carros de la cola, yo le pregunté qué pasaba y el policía me respondió que se estaban metiendo en las colas para cobrar los cupos, dos mil bolívares estaban cobrando aquí”, denunció Romero en entrevista con el diario La Verdad.
La ama de casa afirmó que ante la necesidad de movilizarse, “no me quedó más remedio que someterme a esto. Yo no estoy de acuerdo con el chip pero me veo obligada porque la única estación que yo visito ya esta automatizada”, relató sentada bajo el cují de un edificio de la avenida El Milagro.
A Romero le acompañaba, Lía Ortega. Ella también llegó a las 8.00 de la mañana y su carro fue identificado con el número 74. Cerca de la 1.00 de la tarde la abogada, quien se tomó el día libre para dedicarse a la colocación del chip, seguía esperando para ingresar al estacionamiento.
“Cuando llegué había adentro 50 carros, según nos informan, son los que quedaron pendientes de ayer. Han pasado más de cinco horas y la espera en este solazo se hace inhumana”, criticó.
Gasolina sin chip
Abarrotadas permanecen las gasolineras que siguen en modalidad todo usuario. “Me toco agarrar mi hora de almuerzo para venir a echar gasolina, llevo más de una hora perdida aquí”, se quejó Lewis Rojas, trabajador del Instituto Nacional de Canalizaciones.
Dos carros más atrás esperaba, paciente, en su Conquistador dorado de los años 70, Yoandri Semprún. Aletargado por el inclemente sol, el joven tras el volante manifestó su molestia por la situación de la gasolina.
“No todos los que trabajamos en trasporte público somos delincuentes, yo acabo de comprar este carrito para sobrevivir pero debo hacer a cola porque para poner el chip necesito hacer el traspaso del carro y eso sale muy caro. El pobre es el que sufre en este país”.
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