Janese Walters, una mujer de Ohio nunca pensó que su propio gato la dejaría ciega de un ojo tan solo por lamerla y jugar con ella.
Los doctores llegaron a esta conclusión después de que la mujer despertara y no tuviera visión en su ojo izquierdo.
Janese fue al hospital y los doctores no atinaban a darle una explicación, pues la mujer estaba saludable, hasta que mencionó a su gato.
Poco a poco y atando cabos llegaron a la conclusión que lo que Janese tenía era «Cat Scratch Disease», una enfermedad cuyos síntomas aparecen dos semanas más tarde de haber sido expuesto al animal y que se trasmite de gatos a humanos a través de la saliva o el pelo del animal.
La enfermerdad solo puede ser trasmitida a través de los gatos y no de humano a humano.
Tras el incidente, los expertos aconsejan lavarse las manos después de jugar con un gato, no jugar de forma agresiva con el animal y mantener al minino saludable.
https://youtu.be/KrxZSmBgBQ8
Fuente: DC|Telemundo