Esta expresión tan conocida y vendida como fórmula de éxito milenaria, puede resultar una oferta engañosa, una mentira y sin pensarlo mucho: ¡un mito!. Quizá muchas personas que lean esto me asegurarán que sí, que les ha funcionado… respetuosamente, les cuento:
Cuando emprendemos una nueva relación sin haber superado la anterior (en pleno guayabo), a pesar de las buenas energías e intenciones, el/la ex aparece sin llamarlo/a en nuestros pensamientos o peor aún: en nuestro vocabulario, convirtiéndose en fantasma enemigo de la nueva relación y hasta motivando una injusta comparación, lo que lleva al constante saboteo de la fase de “enamoramiento”.
He leído estudios, donde se habla del fortalecimiento de la confianza en sí mismo, cuando una persona, luego de una ruptura, se engancha con otra en el corto plazo. Es decisión individual, pero personalmente estoy convencida, que se burla la soledad, se alivia temporalmente la sensación de pérdida, pero el malestar de la separación, reaparece luego.
Cuando se quiebra una relación, por las razones que sea, es oportuno darse el permiso de molestarse, ponerse triste, enfrentar la soledad, en fin, pasar por todas las etapas del duelo. Superarlo, no siempre es un tema de tiempo, sino más bien del trabajo personal que se haga. Sé que muchas personas no se detienen a reflexionar, porque la vida sigue y tiene un ritmo a veces, avasallante. “No tengo tiempo” es una frase recurrente, pero sin duda, saltar la pausa y seguir (hacerte la loca, pues), podría hacerte repetir historias y errores. Incluso podrías hacerle daño a más personas.
Si se tienen encuentros recreativos donde el objetivo no es superar a la ex pareja pero si distraerse, y divertirse sin mayores vinculaciones emocionales, es sano y adecuado que ambos estén en la misma sintonía para no crear falsas expectativas. (Ah, y recuerda usar preservativo para evitar consecuencias para la salud)
Cuando ya no existan rencores, resentimientos y cuando quieras o estés lista para tener a una persona nueva contigo, lo sentirás y si no lo tienes muy claro, el recurso terapéutico siempre es una opción.
Fuente: DC|EmeDeMujer