Morales reapareció este martes abrigado con un suéter de cuello alto y una cazadora de cuero con motivo de una recepción a una delegación de la Autoridad Monetaria Palestina (AMP) que visitó Bolivia.
El presidente de ese organismo, Yihad Jalil Al-Wazir, obsequió al mandatario boliviano una tradicional kufiya (pañuelo) árabe, prenda que se ha convertido en un símbolo mundial de la lucha palestina.
Antes, el gobernante asistió a la inauguración de las obras de una de las estaciones del teleférico que conectará La Paz con la ciudad vecina de El Alto.
Morales no se refirió en ninguna de las comparecencias a su estado de salud.
El mandatario suspendió ayer sus actividades oficiales en La Paz y en la ciudad andina de Potosí, y guardó reposo por consejo médico para recuperarse de una gripe que padece desde hace varios días.
La ministra de Comunicación, Amanda Dávila, declaró ayer que la muerte del presidente venezolano, Hugo Chávez, ha hecho que Morales piense más en su salud y escuche a quienes le aconsejan que debe descansar más.
«Todo el mundo le pide siempre al presidente que se cuide, que por favor, descanse. El presidente en este último tiempo creo que está escuchando un poco más la voz de todas las personas que le dicen que descanse un poco y que se cuide más», manifestó Dávila.
El mandatario, de 53 años, era un aliado y amigo de Chávez, fallecido el 5 de marzo pasado, tras una larga lucha contra el cáncer.
DC/Últimas Noticias