Durante la audiencia de presentación, la fiscal 4º de esa jurisdicción, Andreína Torres, imputó a la mujer por la presunta comisión de los delitos de homicidio calificado con alevosía por motivos fútiles y sustracción de menor.
La representante del Ministerio Público imputó al joven por presuntamente ser facilitador en el delito de homicidio calificado con alevosía por motivos fútiles, previstos y sancionados en el Código Penal y en la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes.
En ese sentido, el Tribunal 3° de Control del estado Táchira, con base en los elementos de convicción expuestos por la fiscal, dictó la medida privativa de libertad para las dos personas y fijó como sitio de reclusión el Centro Penitenciario de Occidente, mientras se cumple el lapso correspondiente para la presentación del acto conclusivo.
El citado día, Gómez habría llevado a una vivienda de su propiedad a Salazar, quien estaba embarazada. Minutos más tarde, la embarazada fue sorprendida por su acompañante, quien la habría golpeado varias veces en la cabeza ocasionándole la muerte.
Posteriormente, Gómez procedió a extraerle la bebé, para luego llevarla a un centro de salud de esa localidad, donde llegó con signos vitales estables.
El 2 de abril, funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) hallaron el cuerpo de la víctima en el sector San Rafael de Cordero, en el mencionado municipio.
Seguidamente, los efectivos del Cicpc aprehendieron a los hoy imputados en las cercanías del lugar donde ocurrió el hecho, recabando diferentes elementos de interés criminalístico que los vinculan con la muerte de Salazar Ramírez.