Para enfrentar a la albiceleste, Rafael Dudamel repitió el dibujo, pero refrescó las bandas con la inclusión de Martínez en lugar de Caraballo, y de Maceira por Hernández.
Los argentinos saltaron a la cancha con la presión de que una derrota los dejaba fuera de la competencia, y por eso intentaron acorralar a los criollos en los minutos iniciales.
El juego estaba abierto, era para cualquiera, hasta que en un contragolpe empezó la mala noche para los venezolanos. Campagnucci se internó por la derecha, vio a la defensa mal ubicada y tiró un centro cruzado al área que encontró la pierna de Driussi en el área chica para abrir el marcador.
El gol en contra no amilanó al combinado nacional, que fue al frente a buscar el empate, y lo consiguió a los siete minutos, luego de un tiro libre cobrado en corto que terminó con una habilitación de taquito de Peña a Ponce y un remate del ariete a boca de jarro. El linier se equivocó y levantó la bandera: gol mal anulado.
Argentina volvió al ataque y en una jugada a balón parado consiguió su segunda anotación. El cobro del tiro libre dio en la barrera y el rebote le cayó a Sánchez en el área. El mediocampista no desaprovechó (2-0).
Con la impotencia del gol mal anulado y la poca fortuna que tuvieron en la segunda diana encajada, los jóvenes del patio se desequilibraron. La sensación se duplicó cuando Peña recibió un pase bombeado en el área y el guardameta Batalla lo golpeó con los puños en el rostro. Todos pidieron penal, y el principal ni se inmutó.
Tras la charla del entretiempo, los criollos volvieron a sus casillas, pero ya tenían que remar contra corriente. Ponce y Peña no tuvieron ocasiones claras, y la mayoría de las veces fueron solos a la guerra.
Dudamel movió el banco en busca de una reacción, pero no la consiguió. Al 63, Driussi mató la partida, luego de otra jugada polémica en la que Leszczuk retuvo la pelota mientras tocaba la grama con las manos, y luego habilitó al goleador, que castigó.
Así terminó todo, Venezuela no pudo con el peso del anfitrión era una debacle si quedaba fuera anticipadamente y deberá levantarse rápidamente para su próximo compromiso. Sus opciones siguen intactas.
Roalber Torres/Líder