Tres décadas de servicio. Hoy se cumplen 33 años desde que el padre Eleuterio Cuevas, párroco de la Basílica Nuestra Señora de Chiquinquirá, se ordenó como sacerdote. Los últimos años se ha convertido en el guía espiritual por excelencia de los marabinos, principalmente los devotos de la patrona del Zulia, conocida cariñosamente como la Chinita.
Durante todo este tiempo, se ha convertido en un celoso defensor y propulsor de la devoción mariana en la advocación de la Virgen de Chiquinquirá. Los Servidores de María son fieles testigos de su conducta recta y de su férrea disposición para que las cosas funcionen bien.
La fecha no pasará por alto en el propio templo donde ofrece todo su destacado empeño desde hace 15 años. A las 6.00 de la tarde se oficiará una misa para todos los marabinos que deseen asistir a demostrar su afecto y atención al custodio de la Chinita.
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