El virus del Chikungunya se expande vertiginosamente desde la capital a todo el país.
El Ministerio de Salud (Minsa) detectó ya 136 casos en Puerto Obaldía, la comarca Guna Yala, y un caso en cada una de las provincias de Los Santos, Colón y Coclé.
En total, hasta el pasado 1 de agosto, sumaban 155 casos registrados desde que se detectara el primero, en mayo de 2014. De estos, 138 son autóctonos (el contagio fue adquirido en el país), según el boletín epidemiológico del Minsa. De acuerdo con este mismo boletín, el 1 de agosto aún quedaba pendiente de confirmar el origen de dos de los casos descritos y un tercero no tenía diagnóstico firme.
El documento revela que el caso detectado en La Villla de Los Santos es autóctono. Lo mismo sucede con el caso de Arraiján, provincia de Panamá Oeste.
En el distrito capital se han dado casos autóctonos en los corregimientos de Betania, Río Abajo y Juan Díaz, el Amelia D. Icaza y en el distrito de San Miguelito.
El mayo del año pasado, se descubrió el primer caso, en una mujer que había ingresado al país desde el Caribe ya afectada por el virus. Ahora, 16 meses después, los casos autóctonos superan a los importados.
De acuerdo con el boletín, las mujeres han sido las más afectadas por el virus, con un registro de 85 casos, frente a 75 pacientes hombres.
Al revisar las cifras de afectados por edades, se observa que el grueso de los pacientes están entre los 35 y 49 años, que suman 34 casos, seguidos por personas entre los 25 y 34 años de edad, que registraron 22 enfermos.
También se dieron tres casos entre menores de un año de edad y once niños contagiados en edades de uno a cuatro.
Ante el aumento de los casos, las autoridades del Minsa piden a la ciudadanía ‘al menos cinco minutos’ para revisar las viviendas y eliminar potenciales criaderos del mosquito, en escurre platos, debajo del fregador, canales de techo, bebederos de animales, tanques de almacenaje de agua, platillos, vasos y hasta potes.
Además, recomiendan limpiar lotes, piscinas y fuentes, así como colocar las llantas no usadas bajo techo.
EL OTRO VIRUS
El Minsa también reportó 1,130 casos de dengue hasta el 1 de agosto de 2015, de los cuales uno es dengue hemorrágico y el resto, clásico. De acuerdo con la entidad, solo en la semana epidemiológica número 30, que va desde el 26 julio al 1 agosto de 2015, se registraron 29 casos de dengue. El distrito capital y la provincia de Bocas del Toro fueron las que más casos reportaron con 13 y 5, respectivamente.
Las autoridades de Salud manifestaron su preocupación por el alto índice de infestación del mosquito Aedes aegypti y albopictus, que mantiene la comunidad de Las Garzas, en el corregimiento de Pacora, que alcanza a 4.8 de cada 100,000 habitantes.
Sin embargo, al medir los niveles de infestación por corregimiento, El Chorrillo y Bella Vista registraron los niveles más altos, con 17.4 y 8.8 casos, respectivamente, por cada 100,000 habitantes.
El epideomólogo Carlos Brandaris corroboró que el virus del Chikungun llegó a Panamá para quedarse y se está regando por el país.
Los malestares que producen el Chukungunya, a diferencia del dengue, duran más tiempo y el sufrimiento de los pacientes es mayor, explicó.
Esta situación de contagio al alza, dijo, es producto de la desidia de la población. Mientras las personas no tomen conciencia de la necesidad de eliminar los criaderos del mosquito, ninguna de las dos enfermedades podrá eliminarse, recalcó. ‘Ningún sistema de salud del mundo puede tener un inspector en cada casa para detectar la existencia de criaderos del mosquito’, subrayó el experto, profesor de epidemiología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Panamá. Brandaris recomendó la sanción como única fórmula eficaz para implicar a la población.
DC|LE