Los ejercicios en el gimnasio generan placeres inesperados que provocan orgasmos femeninos. La tendencia se denomina «coregasm» y el aparato más deseado es el llamado «la silla del capitán». También hacer abdominales, spinning o levantar pesas produce gratificaciones, según estudio de la Universidad de Indiana.
En concreto, hacer abdominales, trepar por una cuerda, el spinning o levantar pesas pueden provocar esos placenteros y totalmente inesperados efectos secundarios. Parece ser que una máquina, llamada «la silla del capitán», es la que proporciona los mejores momentos.
El trabajo, que aparece publicado en una edición especial de la revista Sexual and Relationship Therapy, se basa en encuestas realizadas a 124 mujeres que afirmaron haber experimentado orgasmos inducidos por el ejercicio (EIO, por sus siglas en inglés) y 246 mujeres que experimentaron placer sexual inducido de la misma forma (EISP), sin llegar hasta el final. Las mujeres tenían entre 18 y 63 años, la mayoría estaban casadas o tenían pareja y alrededor de 69% se identificaron como heterosexuales.