El lubricante puede hacer el encuentro sexual más placentero, bien sea por falta de lubricación natural o porque no fuiste bien estimulada, es un producto que puede servir muy bien para disfrutar el momento con tu pareja.
Si los problemas de lubricación natural son constantes es recomendable que visites al ginecólogo para determinar la causa. El lubricante puede ser utilizado por placer y hoy te enseñamos como elegirlo:
Base de agua: Son ideales, pues no corres el riesgo de que rompan el condón y no causan irritación vaginal.
Los lubricantes de aceite y de pasta no son los más recomendados, porque debilitan los condones y alteran el PH vaginal ocasionando infecciones e irritaciones.
Tipos de lubricantes de agua:
• Lubricantes térmicos: Son ideales para dar masajes y usarlos por todo el cuerpo. No debes usarlos en la zona vaginal.
• Lubricantes untables: En presentación sólida o gel.
• Lubricantes en supositorio: Para los hombres que quieren experimentar con su Punto P.
• Lubricantes con feromonas: Estimulan el deseo sexual.
• Lubricantes ecológicos: Son Hipoalergénicos por lo que es ideal para los que sufren de alegia.
• Lubricantes-estimulantes: Son fabricados con arginina y mentol y ayudan a estimular el tejido del clítoris.
• Lubricantes de silicón: son adecuados para el sexo acuático, pero pueden causar irritaciones. No deben usarse con juguetes sexuales de silicón.
Recuerda al usar lubricante que debes mantener una higiene adecuada:
• Lo idóneo es tener un lubricante para la vagina y otro para el ano.
• Al terminar procura limpiar bien la zona si utilizaste un lubricante.
• Solo utiliza unas gotas, si usas más puede ser incomodo y no lograrás el objetivo placentero.
• Hay que estar pendiente de la fecha de vencimiento.
Entre las ventajas de usar estos productos está el de evitar el dolor durante el sexo, aumentar la sensibilidad en los hombres y facilitar la penetración.
DC|EM