Contrariamente a lo que se piensa, la artritis reumatoide no es una enfermedad que solo afecta a la gente de edad avanzada. La inflamación de las articulaciones puede iniciar a cualquier edad, a menudo durante la juventud, y aunque no tiene cura, la atención temprana con un reumatólogo puede controlar el progreso de la patología para seguir manteniendo una vida productiva.
La reumatóloga Eillen Macías, expuso que la artritis es una enfermedad del sistema inmune que afecta a las articulaciones grandes y pequeñas, se presenta a cualquier edad. Detalló que existe un grupo específico de patologías que aparecen durante la edad pediátrica menor a los 16 años, que pueden ser categorizadas en siete tipos específicos. En Venezuela, la enfermedad afecta aproximadamente al 1% de la población.
De acuerdo al registro del Centro Nacional de Enfermedades Reumáticas (CNER) esta patología en el 2014, ocupó el segundo lugar entre los diagnósticos de consulta. “Afecta más a mujeres, en una proporción cercana de 2 a 1 con respecto a los hombres. Las mujeres son más afectadas en la edad fértil, (30 y 50 años), con un pico mayor en los 40 y 50 años. Se desconoce el predominio en mujeres, se cree que pueden influir las hormonas”, especificó Macías.
Movimiento limitado
El término artritis significa inflamación articular, el síntoma principal es el dolor originado por la inflamación de las articulaciones de manos y pies, acompañada de limitación de la movilidad y rigidez, que se presenta principalmente en horas de la mañana o en periodos de inactividad.
“No se conoce el factor desencadenante que inicia el proceso, pero se sabe que es una enfermedad autoinmune, en la que el propio sistema de defensa del individuo ataca sus articulaciones. Hay ciertos genes que hacen a una persona más susceptible, y existe una tendencia familiar también. Cada día surgen nuevos datos que permiten conocer cómo se produce el proceso inflamatorio y con ello poder combatir la enfermedad”, explicó la especialista.
Atención temprana
La artritis es una enfermedad difícil de diagnosticar, por ello se recomienda estar atentos con la duración de los signos de advertencia (dolor, a veces hinchazón, rigidez) que al tener dos o más semanas, ameritan consultar al médico. “La demora en el inicio del tratamiento puede ocasionar deformidad y limitación funcional a las actividades de la vida diaria, con pérdida de años de vida útil y la discapacidad física”, indicó Macías.
El tratamiento de la artritis está dirigido al control de la enfermedad, con medicamentos que evitan las deformaciones y las complicaciones por la actividad inflamatoria. Los pacientes jóvenes y adultos cuentan con guías, elaboradas por grupos de expertos de todo el mundo, enfocadas a las manifestaciones clínicas. “Tenemos disponibles tratamientos que permiten al paciente con artritis alcanzar el control de la enfermedad, sin dolor ni deformidades. La adherencia al tratamiento es fundamental para lograr tener una vida productiva”, resaltó la experta en reumatología.
DC | NP