Abdul Aziz Al Kassar, que vive en Kuwait, visitó la capital saudita por motivos de trabajo. Antes de acudir, le preguntó a sus seguidores de una red social cuál era el mejor centro comercial de la ciudad y anunció que aceptaría sus sugerencias. Sin embargo, no esperaba encontrarse a tanta gente esperándole en el lugar.
Al llegar, el actor se encontró con una oleada de incondicionales, la mayoría mujeres jóvenes, que le rodearon mientras coreaban su nombre. Un agente de la Comisión para la Promoción de la Virtud y la Prevención del Vicio, la policía religiosa de Arabia Saudita agarró al actor por la camiseta y le arrastró hasta una oficina cercana.
Al Kassar quiso aclarar que la presencia de las admiradoras no estaba bajo su control y añadió que tanto los miembros de la Comisión como el personal del recinto deberían haberle advertido acerca de la multitud que se había congregado.
DC/Informe21.com