La Policía española detuvo esta madrugada en Madrid a tres personas de origen marroquí acusadas de formar parte de un grupo vinculado a la organización terrorista Estado Islámico (EI) que estaban dispuestos a cometer atentados en España.
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, consideró en declaraciones a la emisora Cadena SER que el hecho de no ser personas dedicadas a reclutar o adoctrinar terroristas, sino dispuestas a atentar en España, supone «un salto cualitativo» importante, informó Efe.
Según informaron fuentes de la investigación, la operación fue llevada a cabo por agentes de la Policía en la denominada Cañada Real, un poblado marginal en la periferia de Madrid conocido como el «supermercado» de la droga, donde fueron arrestados dos de ellos.
El tercer supuesto terrorista fue detenido en el barrio madrileño de Vallecas y la operación está coordinada por la Audiencia Nacional española, según las fuentes.
Los detenidos se mostraban dispuestos a llevar a cabo en cualquier momento actos terroristas similares a los cometidos recientemente en países vecinos a España.
Fernández Díaz dijo que esta operación contra el yihadismo, que sigue abierta, se diferencia de otras en que los arrestados no se dedicaban a captar, adoctrinar, radicalizar y reclutar a personas para que se desplazaran a Siria o a Irak a integrarse en el EI, sino que su finalidad era actuar en España, «lo cual es un hecho diferencial sensible».
El ministro explicó que son tres varones de nacionalidad marroquí pero que tenían ya documento NIE (Número de Identidad de Extranjero) y por tanto «una cierta estabilidad de su presencia en nuestro país».
Por todo ello destacó que es «una operación muy importante que marca un salto cualitativo» y estimó que podrían estar dispuestos a cometer todo tipo de acciones como las llevadas a cabo en Francia con el atentado contra la revista Charlie Hebdo y en otros países.
El ministro recordó que España está en alerta 4 de las 5 existentes, lo que significa «riesgo elevado de comisión de atentado terrorista, y por lo tanto las fuerzas de seguridad están activadas para prevenir, proteger e investigar la eventual comisión de cualquier tipo de atentado terrorista».
En los últimos meses se produjeron dos operaciones de este tipo en España, una en la ciudad de Melilla (norte de África) y otra en San Martín de la Vega, municipio cercano a Madrid, además de varias en localidades marroquíes.
En los últimos cuatro años, según el ministro, se ha detenido en España a 171 personas por su presunta relación con el yihadismo.
Por otro lado, diversos informes señalan que cerca de 3.000 personas se han desplazado ya desde Europa para combatir con el Estado Islámico, de los que unos 130 salieron de España.
Estos datos ponen de manifiesto la amenaza que supone el terrorismo yihadista para Europa, y particularmente para España.
DC/EU